De "La Noche más Oscura del Alma" (Cap. II. Parte II).
Es mi vacío
el que no entiendo. La nada. Lo que es distinto del todo. Un espacio donde
creía que había una cosa que le decíamos "nada", pero resulta que ni
siquiera esa cosa está ahi. No hay nada. El problema es la presión que genera a
las cosas de los lados. Trata de devorarlo todo, y hay que mantenerlo a raya.
Cualquier cosa puede moverse hacia allí y cubrirlo. Y me siento completo, al
menos por un rato. Después caigo en reflexiones y meditaciones, y me doy cuenta
de que eso no va aquí, en el vacío, y lo saco. Y de nuevo empieza a presionar a
las demás cosas, a atraerlas. Alex entiende su vacío, logró entenderlo en el
desierto. Yo no tuve el placer de emprender tal viaje místico, al menos no aún.
Alex puede detenerse, dejar que el mundo entero le pase encima, porque sabe que
eso no le hace daño. Sabe que su vacío trata de llenarse de cualquier cosa, y
no lo deja. Es como si hiciera una tregua consigo mismo, y así logra estar en
paz. Yo no puedo, al menos, todavía. No puedo detenerme y dejar que el mundo me
pase encima, me da miedo. Alex me dijo que eso es porque creo que lo que tengo
lo perderé, que cuando sepa que en realidad no tengo nada, que lo que me rodea
también soy yo, en ese momento podré detenerme y entender mi vacío. Y dejarlo
vacío. Alex no fuma, tampoco bebe, pero no me dice que no lo haga. A veces yo
quiero dejar de fumar y me da rabia que él no me ayude. Me dice: "no, eso
es algo que tienes que hacer tú solo".
Abrazo a Alex,
y me pongo a llorar. Las lágrimas me caen solas. Le digo que los odio a todos,
que no quiero nada con el puto mundo, que si alguien llegara y pidiera
voluntarios para ir al espacio y no volver más yo iría, yo iría solo, que me
dan ganas de romper todas las cosas, que sé que no contenerme es signo de
inmadurez, pero odio tener que mentir y que todos supongan que estoy bien y que
soy grande. Me carga el sistema, la sociedad, la cultura, me duelen, me hacen
daño, me clavan cuchillos fríos por todos lados. Y que esta sicodelia me viola
todos los días, me abre de a poco la carne y me mete miedo y dudas y cosas que
no puedo soportar. Que sé que me va a hacer más fuerte todo este sufrimiento,
pero ya estoy cansado, ya no quiero más.
Alex me dice
que sea fuerte. Que conoce un yo mucho más valiente que eso. Uno que lo
arriesga todo, que logra las cosas mágicamente y que enseña y reparte su magia.
Que soy creativo porque lo que siento lo quiero compartir con los demás. Que he
compartido tanto con tanta gente, tantas cosas mías, de mi propia alma, de mi
propia intimidad mental, que me fue mal quizás, me confié demasiado. Pero no
por eso tengo que echarme abajo. Que soy mucho más fuerte que eso. Incluso a
veces soy más fuerte que él.
Y en eso, me
quedo dormido. Alex me deja soñar...
Yo no puedo dejar de temblar
El frío, el viento.
Mi pelaje es delgado
Mi color me camufla
Rechazado, vago en los valles de la evolución
de la selección natural.
No escapo de este mundo físico
y mis extremos traen frío
traen dolor
en los pies.
Mi corazón me avisa que algo anda mal
mi estómago vacío me advierte
no duraré otro día más.
Entonces, el frío, el viento
me acompañan al destierro.
Hasta que veo un rostro conocido
una chispa en medio de la oscuridad.
Me llama.
Me dice a lo lejos
Ven
Ven.
Hay refugio.
Voy lento
Puede ser una trampa
Puede ser una alucinación
Algo falso
Nadie da por dar.
De todas formas, ya no tengo nada que perder.
Me acerco.
Es un animal más grande que yo
Es un tótem
Resplandece
Sus ojos los cubren párpados pesados
Su pelaje le da ventaja en esta tormenta.
Es gigante.
Podría destrozarme en cualquier momento
Me invita a su guarida
"Es una tormenta peligrosa
en la que has decidido vagar", dice.
"Uno no elige el momento
donde sus debilidades van a pagar", respondo.
Comida, calor y un techo.
Nunca me había sentido mejor
¿Cómo no va a ser real
esto que siento en mi interior?
Mis pies de nuevo viven
Comienzo a sentir mis heridas
Me doy cuenta de que en verdad es una tormenta peligrosa en la que
he decidido vagar.
"El camino se vuelve peligroso cuando estás cerca",
dice.
Me cobija junto a él
El refugio es distinto al que yo una vez tuve
Su olor me advierte
estoy en su hogar.
"Cualquiera que te rete, yo te defenderé"
¿Hay algo en mí
que pueda hacer yo por tí?
"Una cosa:
Abraza
tu
caos".
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